2010/02/14 - VISITA GUIADA POR EL MANZANARES

El pasado domingo, 14 de Febrero, el grupo de Urbanismo de Ecologistas en Acción organizó una visita crítica a las obras de ajardinamiento y urbanización que se están llevando a cabo en los márgenes del río Manzanares, como parte del programa municipal Madrid Río. La visita estuvo guiada por Juan García Vicente, de "Salvemos la Casa de Campo", y a la misma asistieron varios componentes de "Madrid Ciudadanía y Patrimonio", como su presidente Vicente Patón, el representante de "Canal Real del Manzanares" Álvaro Bonet, el vocal técnico Manuel Doval, la paisajista Ángela Souto y el asociado Alberto Tellería. Durante el recorrido, desde el puente del Rey hasta el puente de Toledo, se pudo comprobar el aspecto positivo que supone la eliminación del tráfico en superficie, o la calidad del diseño de pavimentos y detalles de trazas y mobiliario urbano, pero también la torpe y apresurada construcción, a pesar del derroche de calidad de los materiales empleados.

Por otro lado, quedaron patentes los tremendos daños que ha causado esta obra tanto a una considerable cantidad de arbolado que ya existía, eliminado a veces innecesariamente, y resultó desolador contemplar el desprecio con que han sido tratados los principales e importantes monumentos del lugar: la destrucción del recorrido y boca de salida del túnel Bonaparte, que formaba parte del eje monumental Palacio Real-Campo del Moro-Puente del Rey-puerta de la Casa de Campo, la modificación de la configuración original de esta última puerta, la eliminación de trazas, arbolado y cercas de la Huerta de la Partida, el gravísimo enterramiento de los tajamares del Puente de Segovia ¡hasta el arranque de los arcos!, el corte de los cimientos y pilas de apoyo del Puente de Toledo, y el hundimiento general del cauce del río que se produce al levantar sus márgenes varios metros para así intentar disimular la presencia de la autopista subterránea y sus innumerables bocas de registro y ventilación.

 

 

Una obra que -aunque de discutible sentido- demuestra tener utilidad para los vecinos que estuvieron castigados durante años por la presencia de una autopista, ha perdido gran parte de sus posibilidades por la falta de unos estudios iniciales serios y rigurosos y la ausencia total de un estudio medioambiental. La apresurada prepotencia del alcalde puso por delante de los bienes de la ciudad sus intereses electorales, al servicio de promover aún más la movilidad del vehículo privado que entra diariamente en la ciudad, Las voces que en aquel momento se levantaron pidiendo una mayor reflexión y participación en esta obra, fueron desoídas, y se puso una operación tan importante en manos de técnicos con una visión unidimensional y puramente tecnicista del tema.

Otra oportunidad perdida para Madrid, y una carga económica que va a lastrar a la ciudad durante muchos años.