Asilo de San José y Colegio e Iglesia de Nuestra Señora de la Paz

Por mcypweb, Mar, 07/07/2020 - 18:59

La Inclusa y el Colegio de la Paz son dos instituciones públicas de larga historia: la primera tiene su origen en 1572, cuando la Hermandad de Ntra. Sra. de la Soledad y de las Angustias extendió sus fines caritativos a recoger a los bebés abandonados; mientras que el Colegio fue una fundación póstuma de la duquesa de Feria, ejecutada en 1679 con el fin de completar la educación de las niñas recogidas en la Inclusa, con la que acabaría fusionándose en 1799, cuando ambas instituciones, instaladas en dos edificios anexos con fachadas a las calles de Embajadores y Mesón de Paredes, pasaron a ser gestionadas por la Junta de Damas de Honor y Mérito. En 1849, tras varios periodos en que interviene la Beneficencia municipal, la Diputación Provincial pasa a compartir su gestión con la Junta de Damas, que entre 1903 y 1906 construye en terrenos cedidos por la reina viuda María Cristina de Habsburgo el denominado Asilo de San José según proyecto del arquitecto provincial Luis María Argentí Herrera, con el fin de acoger a las recogidas de la Inclusa convalecientes de alguna enfermedad. Este primer edificio se completa al sur con un pabellón en la esquina con la calle Doctor Castelo, y al norte con la iglesia de Nuestra Señora de la Paz, en la esquina opuesta con O’Donnell, costeada por el senador vitalicio Adolfo Bayo –antiguo inclusero- y levantada por el arquitecto Joaquín Kramer Arnaiz entre 1905 y 1910; a la que se adosa en 1918 un nuevo pabellón promovido  por la Diputación para alojar a los niños de lactancia y parte del Colegio de la Paz. Se establece así el germen de un futuro conjunto asistencial que acabará absorbiendo por completo las instituciones originales, a las que se añadirá el Instituto Provincial de Puericultura, aunque la incoación como Bien de Interés Cultural queda limitada a los primeros edificios consignados.

El antiguo Asilo de la Paz presenta planta rectangular muy alargada,  paralela a la calle O’Donnnell, de la que sólo resalta el cuerpo de central de acceso, coronado por un piñón escalonado que señala su jerarquía, y que tiene su contrapartida en dos pequeños torreones en ambos extremos. La edificación se desarrolla en cinco plantas de altura: semisótano, baja, primera, segunda, y un cuerpo de ático retranqueado añadido en 1932 por el arquitecto Francisco de Asís Fort Coghen siguiendo las líneas originales. La construcción se ejecuta en ladrillo visto con un concepto claramente funcional, pues Argentí distribuye los huecos regularmente en una retícula dibujada por resaltes de esquina, cornisas y aleros,  reservando la sobria decoración –que no cabe calificar de neomudéjar- a las impostas y los recercados y antepechos de ventanas. El antiguo pabellón del lavadero al sur, con sólo dos plantas de altura que se convierten en tres en ambos extremos, presenta características constructivas similares; mientras que la iglesia al norte ofrece un aspecto muy diferente, pues Kramer planteó un edificio de estilo neogótico de ladrillo revocado, con rosetón y torre central octogonal con chapitel apuntado, en donde los motivos propios del estilo -como las ventanas apuntadas y las cresterías- se combinan con detalles neomudéjares como los arquillos polilobulados que decoran las pilastras, coronan la puerta bajo el alfiz y recorren la cornisa, e incluso con otros eclécticos, como el antepecho clasicista de aspas que recorre la azotea entre pináculos modernistas que modifica el proyecto inicial. El interior, diseñado en estilo gótico del siglo XIII, presenta planta de cruz latina con tres naves –la central más ancha y con coro alto a los pies, y las laterales con tribunas- que se cubren con bóvedas de crucería simples y desembocan en un transepto destacado que da paso a una cabecera con tres capillas poligonales de igual ancho que la nave central. En cuanto al mobiliario litúrgico, destaca el retablo mayor, con tres calles -la central ocupada por la imagen titular de la Virgen de la Paz- coronadas por grandes hornacinas rematadas por doseletes y gabletes calados, así como las vidrieras de la casa Maumejean Hnos. y el órgano fabricado en 1908 por la firma catalana Delgado y Jaume; habiendo desaparecido el púlpito neogótico que puede verse en antiguas fotografías, así como algunas imágenes procedentes de la antigua Inclusa.

En 1986 la arquitecta María Luisa Meyer Delgado restauró las fachadas de la iglesia, y entre 1989 y 1995 el arquitecto Daniel Buró Arbues remodeló el antiguo Asilo de San José para convertirlo en la Residencia de Mayores de la Paz, conservando  su disposición lineal y la escalera y capilla originales, al tiempo que Raquel Flórez Blasco consolidaba la torre de la iglesia. Por desgracia, entre 2000 y 2004 fueron demolidas muchas de las edificaciones traseras, incluido el pabellón de lactancia a O’Donnell o la vaquería a Doctor Castelo.

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c/ Doctor Esquerdo, 44
Ubicación

c/ Doctor Esquerdo, 44
Madrid Madrid
España

Tipo de Bien
BIP - Bien de Interés Patrimonial
Cronología
Siglo XX
Fechas clave
1903
Estado del BIC
Declarado
Autor o autores
Joaquín Kramer Arnaiz / Luis María Argentí Herrera
Titularidad
Pública
Propietario o tenedor
Comunidad de Madrid
Visitable
Tipo de visita
Visita libre (sólo exterior)
Condiciones de visita / Accesibilidad

El lugar funciona como una Residencia de Mayores y como iglesia. Su acceso es restringido a su función.

Horario de eucaristías: De Lunes a Sábado de 12:00hs a 18:00hs.

Contacto: 659538402

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